domingo, 2 de noviembre de 2014

EL PROGRAMA SCOUT Y EL DESARROLLO DE LA COMUNIDAD - II

Por lo que se acaba de decir es claro que: 
1. En el Escultismo cualquier acción que se realice en orden al desarrollo de la comunidad debe formar parte del Programa Scout, por lo que debe estar conforme a la estructura, el Marco Simbólico y el Plan de Adelanto de cada una de las Secciones. El Escultismo no busca el desarrollo de la comunidad por sí mismo, sino la formación integral de los Muchachos, y se vale del desarrollo de la comunidad como de otros elementos para lograr ese desarrollo. Dicho en otras palabras, el desarrollo de la comunidad es un medio, no el fin que se pretende conseguir, por lo tanto se deben buscar aquellos proyectos que más ayuden al fin que pretende el Escultismo. 
2. Cualquier proyecto del Escultismo para desarrollo de la comunidad, será progresivo de acuerdo a lo que eso especifique el Programa Scout en cada una de las Secciones. Y si bien el Escultismo es un colaborador en la comunidad con la que pretende trabajar, la toma de decisiones de cualquiera de las actividades de desarrollo de la comunidad deberán ser aprobadas, controladas y evaluadas no para, sino con la comunidad y por la estructura propia de cada Sección. 
3. Es claro que las acciones de desarrollo de la comunidad no solamente servirán a la comunidad con la que se trabaja, sino sobre todo serán en beneficio de los Muchachos, ya que de esta manera caerán en la cuenta de que en su mismo país hay realidades socio culturales diferentes a las que él vive, y además se sentirá solidario con los más necesitados, a los que ayudará, lo que es una especie de símbolo de la solidaridad con su patria y con la humanidad toda. Como se ve no basta con la realización de acciones, sino que es necesario el darles a esas acciones una motivación. 
4. Una motivación de tipo religioso en la que se insista en la hermandad que existe entre todos los hombres, puede ayudar a que se susciten los sentimientos de fraternidad e igualdad que serían convenientes para realizar los proyectos de desarrollo de la comunidad. Esta motivación no se puede considerar ajena al Escultismo, ya que está conforme a la Ley Scout. 
5. Como una verdadera motivación para realizar este tipo de acciones, mucho puede ayudar el que se propongan motivaciones de tipo religioso. No basta con pensar en acciones de filantropía o de mera compasión con el prójimo, la fraternidad entre todos los hombres es un concepto que se trabaja en la mayor parte de las religiones, por lo que estas motivaciones deberán ser de tipo religioso en las que se subraye la fraternidad. El prójimo no es alguien que es ajeno a mí, sino que es un hermano que tiene una necesidad y a quien yo puedo ayudar. 
6. Para el Escultismo lo más importante en las acciones de desarrollo de la comunidad no son las acciones mismas o la obra que se realiza, sino la conciencia que adquiere un muchacho mediante éstas, ya que lo llevarán a conocer otras realidades sociales diferentes a la suya propia, realidades que conforman su patria. En esta línea hay que pensar que en las actividades al aire libre los muchachos pasan por poblados o rancherías y ordinariamente no caen en la cuenta de las limitaciones y carencias de los que ahí habitan; más aún al ir o volver de la escuela podrá observar el mundo que lo rodea en la misma ciudad en la que vive. El no conocer estas realidades diversas de la propia origina que, por un lado no se aprecie lo que es propio, y se desprecie al prójimo por no tener lo que el muchacho tiene. Conociendo estas otras realidades es fácil que el muchacho se motive a ayudar a su prójimo. Al caer en cuenta de esas otras realidades diversas a las del muchacho, se puede crear en él la actitud de servicio que tanto necesita en la actualidad. Este servicio no hay que pensarlo solamente desde un punto de vista económico, sino que es igualmente válido el servicio que se dé desde el punto de vista cultural o cualquier otro. 
7. Por parte de la comunidad con la que trabajan los Scouts, lo más importante no es darles algo, sino el realizar conjuntamente los Scouts y la comunidad una labor1 que sería una especie de modelo de otros trabajos que ellos podrían realizar más adelante ya solos, o cuando ya no estén los Scouts. Así por ejemplo, es más importante enseñarles a cultivar verduras en camas de agua, que el darles o venderles verduras baratas que los Scouts podrían conseguir. Así lo más importante es enseñar a una comunidad a bastarse por sí misma, para lo que los Scouts no serán sino una especie de catalizador de las acciones de la comunidad.

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